martes, octubre 10, 2006

La voz de Mónica de Friends se ha callado

Hoy ha muerto una de las mejores actrices de doblaje del panorama español, se trata de Concha García Valero, una voz inconfundible a la que prefiero no ponerle cara puesto que su valía y lo mucho que consiguió en esta vida ha sido por su particular voz, reconocible en la cara que os presento hoy, Mónica en Friends, asi como Nina Meyers en 24 y tantas tantas otras que no me cabrían en este blog.

Su repentina y sorprendente muerte me ha hecho reflexionar y sobretodo valorar con mucha profundidad el trabajo de los actores de doblaje, a quien únicamente parece que se les cita para debatir sobre el tema de la versión original o versión doblada. Creo que es una de las profesiones más desacreditadas e infravaloradas por la mayoría de la gente y sobretodo por esos defensores aférrimos de la versión original que no tienen en cuenta que además de dobladores son actores y su manera de meterse en la voz y en la piel de cada uno de los personajes que interpretan es envidiable y digna de reconocer. Quiero decir, que no es que esté en contra de la versión original, sino que prefiero que existan las dos alternativas a gusto del espectador más que un odio extremo y una crítica constante hacia un sector que trabaja para que nosotros entendamos a esos personajes que nos gusta seguir.

Y además me he parado a pensar, en un ejercicio que suelo hacer con mi pareja cada vez que vamos a ver una película o vemos una serie en la tele y es adivinar a quien pertenece esa voz tan peculiar que estamos escuchando. ¿Y no os ha pasado alguna vez que cuando le modifican la voz a un protagonista, nos quedamos extrañados y no reconocemos a quien vemos en pantalla?. Eso creo que es la magia de los dobladores, que al igual que la profesión que amo que es la radio, son capaces con un único instrumento que es la voz, comunicar a la gente sentimientos, ideas, diálogos divertidos, tristes, increibles... y sobretodo darle una personalidad a un actor a quien indentificas no solo con su actuación sino con el tono de voz que tiene.

Con Concha García Valero lo tenía fácil, ¿quién no sería capaz de reconocer a Mónica de Friends nada más escucharla en pantalla? y me encanta jugar a identificar esas voces (aunque cuando no doy con esa persona me puedo tirar horas y horas dandole vueltas a la cabeza hasta que lo descubres y esa sensación de alivio no se puede describir)y por desgracia ya no voy a poder hacerlo con esta gran actriz de doblaje.

Estes donde estes, Concha, que descanses en paz y la voz de Mónica y de tus muchos personajes seguirán sirviendo para recordarte, no lo dudes.

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