La influencia de las palabras

Para una locutora, imaginaos si tienen influencia en su vida las palabras. Palabras que puedes decir para animar a alguien antes de presentar una canción, palabras que hieren a alguien aunque no sea esa tu intención, palabras que dices sin pensar, palabras que pueden cambiar el rostro de las personas que quieres...

Durante esta semana, he estado jugando con las palabras (también acompañadas de una puñetera tos irritativa que no quiere alejarse de mi), delante de mi soñado micrófono, y la experiencia no ha podido ser más positiva. Mi primer Buenos dias, al frente de las mañanas de Radio Costa del Sol, me llenó de energía y realmente me conciencé por completo, de que mi sueño está empezando a cumplirse.

Todavía le tengo que coger el tranquillo a los concursos de la radio, porque yo le quiero dar premios a todo el que llama y parece ser que las marcas comerciales no están de acuerdo con este principio, y las palabras se tuercen y se convierten en nervios, cuando nuevamente me vuelvo a equivocar dando un premio. Pero bueno, yo con mis propias palabras me automachaco criticandome, cuando lo que debo pensar es que estoy aprendiendo, ¡¡¡como me cuesta¡¡¡

Mediante palabras, me ha dicho uno de mis mejores amigos que hemos tenido que cerrar un proyecto precioso de un blog de cine (del que posteriormente surgió este arcón), debido a que solo aparecen nuestras insignificantes palabras y nadie se anima a debatir y charlar con nosotros. Tengo que entender que todo el mundo tiene muchas cosas que hacer, pero cuando notas que tu trabajo y tu tiempo no tiene los resultados que se esperaban, lo mejor es dejarlo para dar paso a otra etapa. Yo deseo que este paréntesis se convierta en unas palabras nuevas porque tenemos mucho que contar en cuestión de cine y ya estoy echando de menos a mi jefe.

De todas formas, os sigo comentando las películas que voy viendo por aqui. Por ejemplo, el poster que abre mi arcón es el de Lucky you, un nuevo proyecto de Curtis Hanson, en el que cuenta una historia muy interesante sobre el mundo del poker, centrada en el personaje de Eric Bana (uno de los hombres de mi lista de deseados).

A través de sus ojos, vamos viendo como se desarrollan los acontecimientos de la historia y eso es lo interesante, porque tiene unas relaciones muy peculiares tanto con su padre, como con sus amigos y la persona a la que está empezando a querer.

Como en Rounders, vamos descubriendo cosillas sobre el mundo del poker con escenas muy divertidas y otras con una tensión dramática muy fuerte.

En resumen, una opción interesante para chantajear a tu pareja que si quiere ver Los Simpsons, después te tiene que llevar a ver, Lucky you.

A mi me funcionó...