martes, junio 24, 2014

Entrevista Mireia Pascual, Pablo Fortes y Noé Lifona - La Espera

La gente se va a reír porque nosotros nos lo pasamos genial. Cada vez que ensayamos no nos podemos aguantar la risa


No consiento el “en Málaga todo está muerto por la época de playa”. Seguiré en mi labor de demostrar que no es así con iniciativas como ésta que os presento de microteatro en el mes de julio con Pablo Fortes y Mireia Pascual como protagonistas y la dirección de LiVe (Noé Lifona y Ángel Velasco). Nos representarán “La espera”, la historia de un hombre que va a buscar a alguien al aeropuerto y quién precisamente le espera es una monja. Nuestra intriga aún subyace más con esa decisión que lanzan al público “Cielo o infierno... tú decides”. En este tipo de formatos se hace partícipe el “hasta aquí puedo leer” para mantener el interés pero sí que he podido hablar con los actores y uno de los directores para que nos motiven aún más a descubrir cómo es esa espera en Microteatro Málaga.

P: ¿Cómo llega este texto a vuestras manos?

Noé: Mi compañero en la dirección, Ángel Velasco, un día me pilló en el Facebook y me dijo “oye he escrito un microteatro y quiero que le eches un ojo” y me lo mandó, le dije que estaba bien pero que se podía mejorar. Así que me dijo que quería que trabajáramos juntos, que le propusiera ideas y que le mandara lo que resultara y así lo hicimos. A él le gustó mucho con mis cambios y lo mandó a MicroTeatro Málaga a ver si lo pillaban y lo cogieron.

P: ¿Teníais claros a los actores?

Noé: Elegí de nuestros amigos en común a estos dos fieras, Pablo y Mireia, que aparte de ser muy buenos amigos, son buenos actores.

P: ¿Entonces cogisteis el papel por amistad o porque os gustó?

Pablo: Por ambas cosas. En días anteriores, estaba con la cosa del microteatro, me picaba ese gusanillo y Ángel llegó, me envió el texto y le dije lo mismo que Noé que había cosas que arreglar, y después no podía parar de reír porque tiene mucho humor de trasfondo, de acciones y de tono que siempre llena mucho el texto.

P: ¿Y el personaje también os atrajo?

Pablo: Más que el personaje, la situación. En el microteatro hay grandes personajes pero en quince minutos no te da tiempo a desarrollarlos. Se presenta una idea, un concepto y te da tiempo a defender una emoción o una carcajada.

Noé: Son personajes mucho más brutos.

Mireia: Claro que se trabaja un personaje pero no es como una obra larga que trata un conflicto de una hora y pico, se busca más el texto como en esta comedia donde Pablo y yo, además, lo rellenamos mucho con lo que va saliendo en los ensayos y lo que vamos proponiendo que eso es lo que también aportamos a los personaje

P:
No hay tiempo para descripciones, hay que ir al grano

Pablo: Toda información es buena.

Mireia: No tienes tiempo para desarrollar los matices que puede tener un personaje pero si que lo ves en esa situación. Por ejemplo, el personaje de Pablo si que pasa por muchos estados de ánimo diferentes. El mío es más planito bueno hasta lo que se puede contar

P: No podemos desvelar mucho más de un chico que va al aeropuerto a recoger a alguien y se encuentra a una monja

Pablo: Es una pieza divertida donde te lo vas a pasar muy bien.

Mireia: La gente se va a reír porque nosotros nos lo pasamos pipa. Cada vez que ensayamos no nos podemos aguantar la risa.

P: ¿Cómo fue vuestro primer día de ensayo

Mireia: El texto no lo teníamos muy bien cogido, sabíamos la idea y lo que decían cada uno más o menos pero hicimos mucha improvisación.

Pablo: Decíamos algunas burradas que algunas se han quedado

Noé: Es la magia de la improvisación

P: ¿Eso se da más en microteatro?

Pablo: Hay que tener cuidado con la improvisación porque está todo en un tiempo controlado y corto y como te vayas de tiempo, no sale bien. Pero van bien para los ensayos y para la creación.

Mireia: Sobretodo los personajes. Yo creo que los hemos creado con las improvisaciones.

Noé: Cuando uno escribe la obra, no hace un trasfondo de personajes muy profundo. Se basa sobretodo en la situación. A medida que vamos avanzando en el texto con las improvisaciones, ellos mismos crean el personaje.

P: Al público le planteáis “Cielo o infierno... tu decides”

Pablo: Es la temática de este mes de Microteatro Málaga.

Noé: La monja es un guiño al cielo pero te prometo que el infierno también va a estar.

Mireia: Cuando tú ves a la monja vestida ya sabes por donde van los tiros pero el otro personaje llega y no sabes por donde va a ir. La monja yendo de monja, da una predisposición de por dónde va a ir con su tópico y luego él no sabes quién es ni de dónde aparece pero se va viendo. Las cosas no son como parecen.

P: Habéis tenido también que hacer un teaser como reclamo para que la gente vaya conociendo qué es lo que le vais a ofrecer y porque actualmente hay que dar a conocer el trabajo por múltiples caminos

Noé: Todo lo que hacemos es poco y más para el microteatro.

Mireia: Son tres días a las semana, muchos pases. Es también algo positivo porque de tanta oferta que hay, hay que hacer más promoción. Lo bueno es que hay mucha oferta, lo malo es que a veces se queda vacía.


Pablo: El vídeo también lo hicimos porque el texto lo permite. Es una idea divertida. Hemos hecho acciones presentando a los personajes en su inicio

Noé: Además ha salido chulísimo. Lo ha realizado José de la Torre

Mireia: Me encanta la música y el final.

Aquí tenéis el trailer que ha realizado José de la Torre, quién es también el cover de Pablo Fortes en la obra.


PINCHAD AQUÍ

P: ¿El microteatro está permitiendo que autores y actores que no podían contar sus historias en el teatro, lo estén haciendo ahora?

Noé: Yo creo que tiene mucha más accesibilidad, trabaja mucha más gente al ser mucho más corto y ves a mucha más gente actuar

Mireia: Autores que no se atreven a lo mejor con una obra entera, la escriben de quince minutos

Noé: Yo es la primera vez que dirijo actores y en una obra grande, lo mismo no me atrevo. Es más complejo, difícil y requiere más dotes de dirección. Aquí al ser quince minutos, lo tengo mucho más controlado y me atrevo. Eso favorece a la incorporación de nuevas personas que se suman tanto para dirigir, escribir o actuar.

Pablo: No creo que perjudique el microteatro al teatro, ni viceversa. Se mueven en sitios diferentes

Mireia: Ahora mismo para los actores es una salida muy buena. Para tú tener una obra de teatro, te estoy hablando de una hora y media o así todos los fines de semana, jueves, viernes y sábado, durante un mes, es imposible. El microteatro no es lo mismo pero te ayuda a poder tener eso. A veces, los actores lo que pedimos es eso. Te tiras ensayando seis meses y luego la estrenas y esa obra se queda ahí. Ya no la puedes mover por ningún otro sitio y no hay accesibilidad al circuito

Noé: Y si consigues dos al mes, es un triunfo


Pablo: Es algo muy cómodo porque estás en tu ciudad aunque no tengas grandes beneficios

P: Siempre he tenido la curiosidad de si para los actores es más placentero el hecho de cambiar de público constantemente cada 15 minutos. Esas caras nuevas que vienen a disfrutar en poco tiempo de tu trabajo

Mireia: Yo he estado haciendo microteatro solo los jueves durante dos meses y hacíamos tres pases. Así que esto para mí es algo nuevo, un mes, tres días a la semana y cinco pases, a ver como sale. Creo que será como un ensayo, como el primero que haces al último, pues igual con los pases con público. Del primero que hagamos hasta el quinto del último día, va a tener cosas diferentes.

P: Al igual que Ángel Velasco que se estrena como director, es tu primer trabajo como director de actores ¿Cómo lo has enfocado?

Noé: Tengo la suerte de conocer a los dos actores y ser muy buenos amigos. He tirado de experiencia personal porque he trabajado con muchos directores. Tengo la idea de saber cómo quiero hacerlo y además es fácil trabajar con amigos.

P: Y siendo amigos, ¿no te ha dado resentimiento de decirles algo que no te gustaba?

Noé: Yo tomo un punto de referencia de fuera, ellos están metidos dentro de la escena y a veces no se dan cuenta de lo que hacen y necesitan una voz que se lo diga

Mireia: Sea amigo o no, eso lo necesitamos. Porque sino no sigues para adelante, te aburre lo que estás haciendo porque ves que no sale y no mejora.

Noé: Siendo amigo he visto trabajar mucho a Mireia y a Pablo. Sé, más o menos, por dónde pueden ir, qué pueden hacer y qué no, así que te resulta más fácil que difícil. Y además hablamos sin ningún tipo de tapujo.

P: ¿Qué has descubierto de ellos como actores que no sabías?

Noé: Que pueden hacer lo que quieran, que lo hacen muy bien

P: Y vosotros a él como director, ¿qué le habéis descubierto?

Pablo: Sabe. Tiene ese ojo fino que te hace tirar por donde es necesario

Mireia: La experiencia que tiene Noé de actor, que yo lo he visto trabajar mucho, le permite que no ha tenido que estudiar dirección porque ha trabajado como actor, ha estado delante del público y ha trabajado con directores, es una cosa lógica porque puedes ver un microteatro, aunque no seas actriz, y decir lo que te ha gustado y lo que no. Si quisiera cambiarlo, ya me faltarían las herramientas pero él si porque sabe mirarlo desde fuera como actor.

Noé: Yo no soy director, yo soy actor y aquí trabajo sobretodo como director de actores. Me he podido centrar más en la dirección de actores porque el ritmo y la tensión se minimizan, no como en una obra de teatro. Siempre he querido hacerlo, no me he sentido capaz y ellos me han brindado la oportunidad.

P: ¿Por qué la gente tiene que ir a ver “La espera”?

Pablo: Es una pieza que no pretende cambiar tu forma de pensar ni cambiar tu vida. Pretende que pases un buen rato.


Noé: Y lo vas a pasar. Más allá de ello, “no es una comedia de caca, culo, pedo, pis”, como anunciamos en el cartel. No vamos al humor fácil sobretodo los gags van independientes del texto. Son de juegos de palabra aparte de ser una comedia de situación. El texto incita a muchas bromas y con las improvisaciones van saliendo y va resultando muy divertido. Puede tener muchos puntos de vista y dejamos un final muy abierto. Eso dará pie a que comentes lo que tú quieras cuando salgas de la obra. Lo que no te esperas por el giro dramático.

Mireia: Tienen que venir a reírse. Esta obra es para eso, yo cada vez disfruto más.

Noé: Yo disfruto cuando la veo y salen cositas nuevas. He visto escenas muchas veces seguidas y me sigo riendo en los mismos sitios

Lo que se van a encontrar cuando entre en “La espera” es a la monja sentada en las sillas del aeropuerto. Así que no le hagan mucho esperar y vayan a las funciones de julio que serán los jueves, viernes y sábado desde las 23:00 a la 1:00 con una duración de 15 minutos en cada pase. MicroTeatro Málaga se encuentra en C/San Juan de Letrán, 12.

No hay comentarios: