jueves, noviembre 27, 2014

Entrevista Tristán Ulloa - En Construcción - Teatro Echegaray

EN CONSTRUCCIÓN” ES UNA HISTORIA MELANCÓLICA Y NOSTÁLGICA PERO TAMBIÉN ES UNA HISTORIA DE APUESTA POR LA VIDA

Nelsón Dante, Carolina Román y Tristán Ulloa

En mi conversación con Tristán Ulloa, muchas veces le hubiera dicho aquí tienes tu momento y explica cómo es esta obra que has dirigido, llamada “En Construcción”, y todo lo que quieras narrar. Tiene una voz calmada y sosegada que es pura música y deseas que la partitura oral nunca acabe. Hubiera sido un buen locutor de radio, sin duda, pero en este caso hablamos con él para que nos explique este montaje escrito por los actores que lo protagonizan, Carolina Román y Nelson Dante y que habla sobre una pareja inmigrante que llega a España para encontrar una vida mejor.

P: En la obra nos muestras esa realidad de tantas personas que pensaron que llegaban a un país donde podían ver construidos sus sueños pero que se encontraron una realidad que no les ayudaba precisamente en esa meta. ¿Qué tiene de particular la historia de Sole y Pablo con respecto a otros montajes que tratan esta temática?

Tristán Ulloa: No sé con respecto a otros montajes porque tampoco he visto muchos que traten esta temática. La historia es tan particular que se parece a un montón de ellas, que recuerdan a muchas más historias. Seguramente el logro que nos podemos poner es que hablando de algo muy concreto, estamos hablando al mismo tiempo de algo muy universal y muy reconocible. El público que ha venido a vernos, tanto españoles como extranjeros, inmigrantes, gente que está de paso o españoles que se van afuera todos nos han hecho devoluciones muy emocionadas y pensando en la piel de los personajes.

P: ¿Por qué “En Construcción”?

Tristán Ulloa: El título surgió un poco del propio proceso creativo de la historia. Esto nació primero como una pieza cortita de microteatro de 15 minutos y luego fuimos construyendo una historia de hora y media. Más allá de eso, también hace referencia a dos personajes a medio construir o a dos personajes que están construyendo su vida, que están a medio camino en un punto de no retorno en el que regresar sea tan costoso como el seguir adelante. Son dos personas en mitad de un trayecto y con el equipaje medio lleno y medio vacío. Es la vida a medias que está por construir todavía, siempre está por construir. Me parece un título muy vitalista en cualquier caso porque estar en construcción es estar siempre en proceso de crecimiento.

P: La obra tiene las dos caras de la moneda. La crítica contra la estafa capitalista y denuncia la desigualdad y el trato a los inmigrantes pero también desprende alegría, sentido del humor y amistad

Tristán Ulloa: No queríamos convertirlo, y me parece que lo hemos logrado, en un panfleto. Sencillamente, hablar de algo concreto de dos personas creo que se habla de mucho más. Es una historia que se extrapola perfectamente y que, contando las necesidades de dos personas sin ningún tipo de signo político ni saña contra nadie, se habla sencillamente de dos personas que pretenden, nada más y nada menos, hacer su vida con las dificultades que se encuentran. Son dos personas que no provienen de ningún ambiente marginal. Son dos personas de clase media, como tú y yo, que lo que quieren hacer es su vida como podemos querer la nuestra nosotros, si nos vamos fuera. Buscar otra oportunidad fuera de nuestro país. Lo que queríamos contar son los obstáculos con los que se encuentran, ni más ni menos. Sin dramatizar, en el sentido de no enfatizar en el melodrama, ni recrearnos ni regodearnos en la tristeza o en la melancolía. Si. Es una historia melancólica y nostálgica pero también es una historia de una apuesta por la vida, tiene mucha vitalidad y sentido del humor. No queríamos quedarnos solamente ahí en la historia de una situación difícil, queríamos que fuera una historia de esperanza y de querer ver más allá de los muros que se levantan. 


Carolina Román y Nelson Dante en una de las representaciones de la obra

P: Los jóvenes, quizás no tanto, porque se están teniendo que ir al extranjero a trabajar y las cifras suben cada mes. ¿Pero se nos ha olvidado a muchos españoles que también fuimos emigrantes?

Tristán Ulloa: Si. Fuimos emigrantes y somos un país de trayectoria inmigratoria importante. De hecho, en la obra hablamos de eso. Jugamos con los audiovisuales en los que vemos las primeras migraciones europeas, sobre todo españoles yéndose a Argentina. En el momento que los protagonistas están viajando de Argentina a España, simultaneamos ese viaje con otro en sentido contrario que son los barcos saliendo hacia América. Somos un país con muy poca memoria o con una memoria a corto plazo, incluso la propia situación nos tiene que recordar que esto puede suceder en cualquier momento, que no somos inmunes y que realmente lo que tratamos es de hacer reflexionar y poner un espejo delante del público y decirles cómo creen que hemos tratado a los inmigrantes o les hemos recibido pero sin emitir un juicio. Sencillamente invitamos a la reflexión y cómo esperamos, ahora que volvemos a ser emigrantes, que nos reciban en otros sitios. Esa es la reflexión, el ponerse en el lugar del otro que probablemente nos hará más tolerantes y nos hará ser más empáticos, ese es el esfuerzo que hacemos.

P: Sois también los productores de la obra. De no haber sido así, ¿hubiéramos podido ver esta historia en el teatro?

Tristán Ulloa: Esta obra surgió de una creación nuestra, colectiva. La escribieron Carolina Román y Nelson Dante que son los propios actores de la obra. Un día pensamos qué podíamos contar y tiraron mucho de su propia historia, porque ellos son inmigrantes y yo también soy producto del exilio. El desarraigo es un sentimiento muy reconocible para el que lo ha padecido. Simplemente queríamos exponerlo y no enfatizar en el drama que era nuestro objetivo. No esperamos a que nadie nos produjese esto porque decidimos hacerlo nosotros ya que tal y como está ahora el patio, no sé si alguien hubiese estado dispuesto a hacerlo. Preferimos tirar adelante y ser libres en el proceso creativo. La independencia tiene un precio, por supuesto. Ha costado levantarlo y han sido, al principio, situaciones bastante precarias y austeras. La obra es muy austera. Pero también, de alguna forma, habla de eso, con lo cual ahí radica el éxito. No es nada pretenciosa en la puesta en escena ni en lo que cuenta. En la sencillez hemos encontrado nuestra mayor virtud y yo creo que eso el público lo está apreciando, así como la crítica y gracias a la gira hemos conseguido poder amortizar la obra. Todo lo que toca temas sociales a los grandes productores y programadores les da miedo. Lo que no quieren es asustar a la gente porque el público va a entretenerse y a evadirse y a reírse. Se entiende como que el entretenimiento y el ocio sólo puede ser evasión. Yo creo que es un error. Tiene que haber tiempo también para la reflexión. Eso no hace que el ocio sea menor. También ahí radica la cultura, que nos haga pensar y no sólo evadirnos. Y por supuesto, estar viendo una historia que te emociona. Por desgracia, no muchos programadores comparten esta opinión y es difícil sacar adelante una gira con una obra como esta, es muy complicado. Todo el mundo quiere caras conocidas de la tele, todo el mundo quiere comedias y yo tengo a dos actores que no son conocidos y esto no es una comedia hilarante. Pero sí tiene mucho sentido del humor, un humor muy inteligente y el público lo aprecia. Yo creo que tiene que haber un poco de todo. No vamos a hacer todos lo mismo.

P: ¿De MicroTeatro ha pasado a obra de teatro, podemos seguir soñando?

Tristán Ulloa: Nosotros seguimos soñando porque nos ha llevado hasta los Premios Max, por ejemplo (donde ha estado nominado el propio Tristán a la mejor dirección de escena). Y desde la nada más absoluta. De nuestros bolsillos ha salido esto que es como decir poco o nada. Seguir soñando nos ha permitido que el siguiente montaje sea en coproducción con el Centro Dramático Nacional (Se llama “Adentro” como el propio nombre de la compañía que lleva “En Construcción” y se estrenará en Abril en el Teatro María Guerrero de Madrid) para la próxima temporada así que el esfuerzo o la fe en lo que estás haciendo y el rigor tiene cierta recompensa, a veces, no siempre.

P: ¿Y cuando te veremos en ese “Invernadero” de Harold Pinter?

Tristán Ulloa:
Estamos ya ensayando y estrenaremos el próximo 16 de enero en Avilés, haremos una pequeña gira y después el 26 de Febrero en La Abadía que haremos temporada en Madrid y luego seguiremos con la gira. Es un proyecto en el que me he implicado en la producción y tenía muchas ganas de trabajar de nuevo con Mario Gas como director después de haber hecho la gira el año pasado como actor en “Julio César”. Durante esa gira ya estábamos hablando de cómo sacar ese proyecto adelante y ver la posibilidad de producirlo juntos y se lo pusimos en la mesa a José Luis Gómez de La Abadía y le pareció buena idea, así que ha sido estupendo. Nuestro mejor capital es juntarnos entre nosotros.


Hasta que llegue este momento esperadísimo, lo más inmediato es que el público malagueño disfrute de “En Construcción”. Estará en el Teatro Echegaray en dos pases, el viernes 28 a las 21:00 y el sábado 29 a las 20:00. Algo construido desde la verdad y la emoción debe recompensarse con su asistencia y más que nada, por las sabias palabras de Tristán en cuanto a que el teatro debe provocar también un efecto de recapacitar sobre aspectos en los que no lo hemos hecho bastante o no nos han ofrecido el punto de vista adecuado para hacerlo. No nos han construido esta posibilidad y con este montaje de Adentro teatro, seguro que lo consiguen.

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